martes, 2 de marzo de 2010

Capitulo 7




Adrián le da un codazo. Lo tumba. Aprovecha que está en el piso para darle patadas.
--¡no me gustan los maricones¡ ¡¡déjame en paz... no seas putita¡ ¡¡eres más puta que la golfa de tu hermana que ya es decir¡
Adrián se va y dejando al otro en el piso lastimado. Lorenzo llora, desahoga su dolor. Tiene muchas cosas en la cabeza, ha sido un día intenso. Siente que el más intenso de toda su vida. Siente muchas emociones y contradiciones en su interior. Se ha sentido el hombre más feliz y ahora se siente la más desgraciada. Apostó fuerte por su felicidad pero no le ha servido de nada.
--he perdido –llora.

Amanece un día más. Lorenzo está destruido moralmente. Desea estar solo. No soportar tener a Adrián cerca y saberlo de otra. A la hora de la comida se aleja del grupo. Se va a un lugar aislado de la montaña. Se sienta en el suelo, llora. De repente va y aparece él de entre las matas. Se sienta al lado de él. Lorenzo no reacciona, está extrañado. Sin mirarlo pero hablándole tiernamente Adrián dice:
--lo siento... siento haberte herido...
Lorenzo no dice nada y él sigue hablando.
--no quería ser brusco pero queria que te desilusionarás de mi y te alejaras de mi.
Se hace un silencio en el que él espera que Lorenzo diga algo. La mira pero Lorenzo sigue con la mirada perdida. Entonces él sigue hablando .
--te quiero como siempre... nunca te olvidé... hacer el amor contigo fue un sueño pero comprende que no puedo dejar a la otra... hace meses que me acuesto con ella, no le puedo salir con esto ahora. Me siento demasiado comprometido. Es tu hermana... entiéndelo.
Lorenzo no dice nada, llora en silencio. Él la mira triste. Le acaricia el pelo. Le pide comprensión. Se vuelve a disculpar.
--no te quería ofender pero es que la otra me había consolado cuando yo me sentí mal porque te fallé.
Parece sincero, arrepentido. Lorenzo lo mira de reojo. Hay tanta ternura en sus ojos que se ahoga en ellos:
--te amo –dice él.
Y sin pensar le propone:
--no me importa compartirte con la otra. Somos hermanos... Hemos compartido muchas cosas... –esto último lo dice con cierta ironía.
Adrián sonríe, lo acaricia y lo besa. La pasión hace que se olviden de todo y allá mismo con solos la naturaleza de testigos hacen salvajemente el amor. Lorenzo lo disfruta más que la anterior vez, sus jadeos son más fuertes que los de Adrián que gime con intensidad. Después Lorenzo puede reposar feliz en brazos de él. Le mete los dedos por la camisa para almenos tocar un poco de su piel. Adrián está reventado y no es capaz de articular ni una sola palabra. Sin dejar de acariciarlo y disfrutar de él, Lorenzo dice:
--lo eres todo para mi, eres mi vida. Jamás he sido tan feliz como contigo.
Adrián , con las pocas fuerzas que le quedan, lo mira orgulloso. Sonríe. Cuando se recupera van por la segunda. Lorenzo cree que se morirá de tanto gozo.
--creo que alguien nos espian –jadea Lorenzo.
--no hay nadie –jadea Adrián. sin parar.

En la noche, todos se están duchando. Lorenzo nunca se había atrevido a ir por miedo al rechazo pero se siente valiente. Adrián está desnudo en la ducha junto a los demás. A todos les sorprende verlos.
--¡¡qué hace el maricón, aquí¡
Todos pegan el trasero a la pared.
--¡fuera, qué nos quieres hacer¡
Lorenzo mira a Adrián con lágrimas a los ojos. Esperaba que lo defendiera y le duele mucho que éste siga duchándose como si no pasara nada. Lorenzo se va corriendo. Se tumba sobre su cama y llora. Está esperando que Adrián vaya a buscarlo, que le pida perdón.
--¡¡todo el mundo sabe que nos acostamos¡ ¿porqué me hizo esto? –se dice.
Se ha acostado con Adrián no una vez sino ya varias.
--¡le gusto... le gusto¡
Siente muchas cosas por Adrián y está seguro que a Adrián le pasa lo mismo.
--Antes pudo ser lo de la apuesta pero ahora lo hizo porque le gustó... ¡¡Sé que le gusto¡ ¡le gusto¡
Le duele que el chico no quiere dar la cara por él.
--Si todo el mundo menos Flor sabe que le van los tíos ¿porqué a él lo aceptan en la ducha y a mí no?
Le da rabia pensar que es por Flor.
--¡¡es que ahora resulta que el amante soy yo cuando ella fue la que me lo quitó¡



Adrián no se acerca al chico. No se separa de sus amigos. Mira con mala cara a Lorenzo y éste no se atreve a acercarse. Además está dolido y no le quiere volver a ir detrás. Así llega la última noche. Los profesores le dejan hacer una pequeña fiesta sólo para jóvenes en una sala del albergue. Uno pone una cinta que han grabado de la vídeo cámara.
--¡Es una película muy bonita que ha grabado Adrián¡
Éste se levanta para recibir los aplausos. Flor aplaude entusiasmada. A Lorenzo no le gusta la mirada de su amado. Y más cuando da a conocer el título de la película “ Adrián, la puta y el maricón”. En la película se ve teniendo sexo a Adrián y a Flor y también a Adrián y a Lorenzo en el campo. Los hermanos se pelean.
--¡te dejaste grabar, guarra¡ --Lorenzo.
--¡y tú también¡
--¡Yo no lo sabia¡
--¡Ni yo¡
Todos disfrutan de esa discusión entre los dos hermanos.
--¡me sacaste a mi novio¡ ¡¡Eso no se hace¡
--¡él estuvo primero conmigo¡
Flor no esperaba eso. Mira a Adrián pero no le da tiempo a pedirle explicaciones. En seguida empieza a recoger dinero de sus amigos.
--¡Eres un crack, volviste a ganar la apuesta¡ --le dicen.
Los que han perdido miran a Lorenzo con desprecio:
--¡Eres un imbécil, cómo has podido caer otra vez¡
Lorenzo se derrumba. Flor no entiende nada. Adrián mira a Lorenzo y le dice riendo:
--Esta vez se trataba de joder con la guarra de tu hermana y que tú te me regalaras sabiendo que soy el novio de tu hermana...
Adrián y Flor se quieren morir. Ninguno de los dos hablan con el otro al respecto de lo que ha pasado.


4 años después... Lorenzo es un hombre amargado. La traición de Adrián le hace ir con miedo. No ha vuelto a estar con nadie. Sólo en los veranos, con su primo Emilio. Empezaron masturbándose juntos, luego el uno al otro al final se hacían sexo oral. Sólo con su primo se siente seguro pero no salen de las felaciones y sólo es cada verano cuando va al pueblo. De nuevo en la
ciudad reprime sus instintos y vive frustrado. Cuando tiene un rato libre, Lorenzo se la pasa en la biblioteca leyendo. Se fija en un negro muy guapo que tiene cerca. Tiene ganas de hacer pis pero no quiere. Espera al negrazo. Es la manera en la que vive su sexualidad sin lastimar sus sentimientos. Mirando. Le gustaría que alguno de esos guapos a los que sigue pues le deje hacer algo. Tiene al negro delante. Le gusta mucho. Pese a que es invierno lleva camiseta de manga corta. Se le ven unos buenos brazos. Muy guapo, con un poco de barba. Lorenzo lo mira sediento.
--¡¡ojalá me echara un polvo¡ ¡Qué delicia de macho¡¡--piensa.
El hombre le ha gustado mucho. Pese a sus miedo, piensa que si el negro quisiera lo olvidaría todo. No se da cuenta que el amigo del negro lo está mirando. Se trata de Federico. Lorenzo no se fija en él y eso es algo que a Federico le molesta y mucho. Pese a los años no ha olvidado la mirada de deseo que sintió cuando se encontraron en el lavabo. Le da rabia ver que no lo recuerda, que está pendiente de su amigo. Madi se levanta.
--voy al lavabo.
Federico no le dice nada. Clava sus ojos en Lorenzo, quiere ver lo que hace él. Lorenzo se muere de ganas porque vaya al lavabo. Su corazón da un brinco cuando se levanta.
--¡¡No me lo puedo creer, va al lavabo¡
Lorenzo va detrás de Madi . Federico lo mira con mucho odio. Lorenzo hace finalmente pis pero para él es una decepción descubrir que no es verdad lo que dicen de los negros. Almenos en el que él tiene al lado no se cumple. La tiene muy agarrada con las dos manos y no se le ve nada. A Lorenzo le excita mucho los movimientos de la mano de Madi (de abajo y arriba) al sacudírsela. Luego se lava las manos y Lorenzo detrás. Le gusta el trasero de Madi . Grande y muy apretado por los jeans. Madi vuelve a su sitio como si nada. Lorenzo también. No se da cuenta que Federico lo está siguiendo con la mirada.
--¡que asco de tío…¡ --dice Federico a Madi .
--¿de qué hablas?
Federico habla con un gran odio:
--De la marica esa… te comía con los ojos. ¿no te has dado cuenta? ¿no te ha hecho nada?

No hay comentarios:

Publicar un comentario