Capitulo 4

Flor siente que Federico es su príncipe azul y está dispuesto a todo con tal de estar con él. Federico está desnudo en la ducha. Se tapa con las manos. Lo que ha visto y lo que está viendo le gusta mucho a la chica. Se muestra inocente pero apasionada.
--si tu me enseñas eso yo te dejo que me hagas lo que quieras...
Nunca una chica había mostrado tanto deseo hacia él y al hombre le gusta. Descubre sus manos.
--¿te gusta? --él.
Ella se sonroja pero es consciente que Federico es mayor que ella, que necesita otras cosas que los chicos de su edad. No quiere que él piense que es una niña que no le puede dar lo mismo que las otras mujeres. Federico la desafía. Quiere saber hasta donde es capaz de llegar la adolescente.
--Mámamela…
Florencia se arrodilla ante él. A Federico le da más placer lo sumisa que es ella, que hace todo lo que él le dice que el acto en sí. Florencia lo toca por donde él le dice, se desnuda cuando él se lo pide.
--ahora te la voy a meter…
A ella le da miedo.
--¡Es lo que yo quiero…¡ --insiste.
Florencia no dice que no pero tampoco que sí. Vive su primera vez así. De pie. En el vestuario de hombres de su escuela. A prisas. Pese a todo para ella es especial. Federico ha sido el primer hombre de su vida y está segura que eso la dejará marcada para siempre. Federico se viste. Se muestra brusco. Se ha dejado llevar por la pasión de la chica y ahora se arrepiente. Se viste de prisa. No quiere que nadie los veas.
--¡ahora ya no quiero que me vuelvas ni a mirar¡
Florencia no se esperaba esa reacción del hombre. Lo que ha hecho ha sido para mantenerlo a su lado no para alejarlo de ella.
--¿¿cómo?
Él le tira la ropa. Se muestra molesto. Ella está conmocionada.
--ya sabes como funcionan estas cosas...
A Flor le tiembla la voz.
--¿de qué hablas?
Él se sube los pantalones. Se los abrocha. Con sarcasmo dice:
--Pus golfa conoce a macho y macho le da lo que busca la golfa... Vístete antes que alguien se entere de lo que eres.
A Florencia le duele mucho el desprecio con el que la trata Federico.
--crei que eras distinto... –llora.
Él se le ríe:
--me olvidarás como has olvidado a los otros.
--¡Era virgen... lo sabes...¡
--Si claro... –si burlón para no aceptar su responsabilidad.
Federico sale subiéndose la cremallera. A la única que ve en la puerta es a Olivia y le dice:
--¡¡dile a tu amiga que no se me acerque más¡ ¡¡ya le ha dado lo que buscaba¡
Él se va. Florencia sale llorando:
--me estrenó pero no cree que sea virgen…
Ninguna de las dos se da cuenta que la chismosa de la escuela lo ha escuchado y le falta tiempo para contarlo a todos.

Federico no vuelve por la escuela. Lorenzo tampoco. A pesar de la mala fama que le han echado, Flor sigue adelante. A diferencia de Lorenzo ella no abandona la escuela. Se jura que nunca la volverán a herir pero el amor es así. Es la cavalgata de reyes. Va con su amiga. Flor se pierde en unos impresionantes ojos azules. Es Gabriel, un hombre de 43 años casado y padre de 3 hijos. Flor lo mira fascinada.
--¡¡ey, ey... es el profe de lite¡¡ --le dice a su amiga.
--por favor... después de lo que te pasó... mira que te gustan los profesores... No escarmientas...
Flor no le hace caso. Está muy nerviosa ya que el hombre, que la ha visto, empieza a abrirse paso entre la multitud y se acerca a ella. El corazón de la joven late a mil por hora. Gabriel y Flor quedan arrinconados hablando ajenos de todos. Él no le dice que vino con su esposa, ella cree que es soltero y le dice que esos niños, sus hijos, son sus sobrinos. Ella lo mira con ternura.
--la verdad es que he hecho un sacrificio por ellos... pero detesto tanto jaleo...
--y yo –ella.
Gabriel se da cuenta que su familia no lo ve:
--vaya, los he perdido... ¿porque no nos vamos a tomar un café?
La chica accede sin miedo totalmente hechizada por los ojos de él. Espera que vayan a un bar pero éste la lleva a un apartamento. Ahí, sin más, la besa con pasión. La empieza a acariciar y desnudar. Ella trata de retenerlo.
--¿es que no me quieres?
--si pero tengo miedo a salir lastimada...
Con dulzura el hombre dice:
--deja que yo te haga feliz.
Ella se funde en sus brazos y deja que el hombre la desnude y la haga suya. Después, ella está feliz pero no puede disfrutar porque él se viste de prisa.
--¿cuando nos vemos?
--yo te busco --él.

(colaboración especial de Gabriel Corrado)

Flor cree ciegamente en su hombre. Cuando vuelven a clase lo va a buscar en su despacho. Están solos.
--¿que haces aquí? –pregunta el hombre asustado.
--es que te eché de menos... No sé nada de ti...
--no debiste venir...
Ella lo besa y alguien entra. Es el director.
--¡¡¿que es esto?¡¡
El hombre no tiene palabras. Se enfrenta con los dos, mira con desprecio a la joven:
--¡el curso pasado me llegaron rumores de un romance tuyo con un profesor –Flor mira con vergüenza a su actual amante—pero esta vez no lo pienso permitir... hablaré con tus padres –y mirando al profesor—y con tu esposa.
Flor mira al hombre llorosa:
--¿estás casado?
Gabriel no dice nada y ahora Flor lo que quiere es que su padre no se enteren.
--si te das de baja no diré nada... Gabriel no estará el año que viene... si quieres te puedes volver a matricular entonces... pero eso sí... ojo con quien te bajas las bragas...
Flor accede y jura que nunca más la volverán a humillar.

Semanas después... Flor y Olivia están sobre la cama. Se hacen confidencias de mujeres. Flor le ha dado la oportunidad a otro chico. Tiene miedo pero Olivia la anima.
--Adrián es el chico que te conviene... Con él no te pasará nada.
Todo ha sucedido muy rápido. Flor tiene miedo pero está ilusionada.
--me encanta todo de él y porque no me atrevo a más...
--¿y eso? ¡si los dos os morís de ganas... daros un buen revolcón¡
--vestido es irresistible... desnudo debe ser ya ...
--¿y cual es el problema? Será el polvo de tu vida.
--es que todo es demasiado bonito como para estropearlo. Tiempo al tiempo...
--no debes temer nada...
--¿y si me deja? Yo estoy loca por él... y él no me ha insinuado nada... no quiero que piense que
soy una cualquiera como todo el mundo...

Por su lado, Lorenzo está muy preocupado.
--Adrián es gay... Seguro que se quiere burlar de Flor. No lo podemos permitir.
A Delfina le hace mucha gracia que Flor sea humillada por un gay.
--¡¡Es que a lo mejor es una apuesta¡ --se queja él.
Delfina odia a su hermana y no le gusta que Lorenzo la defienda.
--¿desde cuando te preocupa la bastardita? ¡¡tú única hermana soy yo¡
Lorenzo adora a Delfina y no se quiere enfrentar a ella.
--Si claro... Yo lo digo por Adrián... Se burló de mí. No quiero que se burle de ella.
Delfina se ríe.
--¡Flor es una golfa... andar con ella es todo un castigo¡
--pero no crees que yo le debería advertir a Flor? Ella debería saber que yo me acosté con él.
Delfina no sabe qué planes pueda tener Adrián pero quiere que sigan adelanta y si Flor sale lastimada mejor.
--¡Te lo prohibo¡
Delfina le habla con dureza a su hermano. Sabe que nunca se pondría en su contra pero por si acaso dice:
--Seguro que Flor sabe lo que pasó con su novio y contigo y por eso está con él... ¡para molestarte¡
Delfina logra sembrar la duda en Lorenzo que le promete no hacer nada.